Habilidades cognitivas: ¿qué son, tipos y cómo desarrollarlas?

18/07/2022
Kumon América del Sur
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¿Alguna vez has pensado cómo se construye el conocimiento en nuestro cerebro? Por cierto, solo el hecho de pensar ya tiene mucho que ver con la respuesta.

Esto solo es posible debido a las habilidades cognitivas. Son ellas que permiten, por ejemplo, que tengas dudas sobre este tema, hagas una búsqueda en internet, leas este texto y recuerdes lo que leyó.

En el caso de los niños, es aún más importante hablar sobre estas competencias y cómo desarrollarlas, ya que están directamente relacionadas con el aprendizaje, tanto en la escuela como en la vida.

En este texto, vamos a explicar mejor qué son las habilidades cognitivas y mostrar algunos métodos que puedes empezar a aplicar hoy mismo, en tu casa, para ayudar a tu hijo a perfeccionarlas.
 


¿Qué son las habilidades cognitivas?


Cognición es el proceso de construcción del conocimiento. Para que esto suceda, es necesario un conjunto de capacidades mentales desarrolladas a lo largo de los años, como memoria, atención, lenguaje, creatividad y planificación. Ellas reciben el nombre de habilidades cognitivas.

Son estas aptitudes que hacen que nuestro cerebro procese todo lo que captan los sentidos, como colores, sabores, olores, texturas y sonidos, interpretando e integrando las características de estos estímulos a nuestro propio conocimiento.

Estas facultades son fundamentales a lo largo de la vida, y por ello deben desarrollarse y trabajarse de la mejor manera posible.


¿En qué etapa se aprenden los aspectos cognitivos?

Nuestra relación con el ambiente que nos rodea ocurre desde el momento en que nacemos. Aprendemos, entonces, continuamente, desde las formas más sencillas hasta las más complejas.

Esto significa que, en cierto modo, nunca dejamos de desarrollar nuestras habilidades, incluso en la vejez. Sin embargo, es en la infancia cuando se presenta el mejor momento para desarrollar las capacidades cognitivas, ya que en este período el niño empieza a descubrir el mundo y es más receptivo a nuevos aprendizajes.

En esta etapa, él pasa por una evolución enorme en términos cualitativos, y la escuela ejerce un papel muy importante, sobre todo en los primeros años de aprendizaje.


¿Cuáles son los tipos de habilidades cognitivas y cómo desarrollarlas?

Los procesos cognitivos utilizan diferentes competencias para, por ejemplo, pensar, aprender, raciocinar, recordar y prestar atención. Ellas trabajan en conjunto y son esenciales para la realización de tareas, desde las más sencillas hasta las más complejas.

A continuación, presentamos algunos tipos de habilidades cognitivas y consejos sobre cómo desarrollarlas.

Atención

Capacidad de elegir y enfocarse en estímulos relevantes, tanto externos, como sonidos y olores, como internos, como nuestros propios pensamientos.

En un mundo con cada vez más estímulos, pantallas y cantidad de información que se genera en los más diversos ambientes, tanto físicos como digitales, esta es una habilidad muy importante.

¿Cómo desarrollarla?

La atención se puede estimular con juegos complejos como el ajedrez. Pero no significa que esta sea la única forma de trabajar este aspecto cognitivo.

Juegos sencillos, como “vivo o muerto”, en que el niño debe ponerse de pie al escuchar “vivo” y agacharse al escuchar “muerto”, son excelentes formas de ejercitar la atención y la concentración.

Enfoque

¿Ya te has imaginado si nuestro cerebro tuviera que interpretar absolutamente todos los estímulos que recibe por medio de los sentidos, como visión y audición? Sería increíblemente complicado. Basta con salir a la calle para comprobarlo. Intenta escuchar todos los sonidos a tu alrededor y observa cuántos de ellos no puedes notar.

Enfocarse es exactamente eso. La aptitud de enfocarse ayuda a ignorar estímulos irrelevantes que llaman nuestra atención, direccionando la atención para puntos específicos.

¿Cómo desarrollarlo?

Como puedes ver, el enfoque está muy relacionado con la cantidad de estímulos. Así, una buena forma de ejercitar esta habilidad es por medio de pasatiempos, como los de laberintos y juegos de los 7 errores.

Creatividad



La creatividad puede definirse como la habilidad para crear, inventar, construir o llegar a un raciocinio inédito por medio de la asociación de ideas y conocimientos no necesariamente relacionados con un problema que debe ser resuelto.

En el caso de la creatividad, la palabra clave es repertorio. Cuanta más información tenga el niño, más herramientas posee para combinar de formas interesantes e innovadoras.

¿Cómo desarrollarla?

Tocar un instrumento musical, bailar, cantar… Todo eso ayuda al niño a comprender el mundo que le rodea, trabajando la creatividad. Invierte también en actividades de dibujo y pintura, motivando a tu hijo a utilizar varios tipos de colores y texturas.

Materiales diferentes también estimulan las habilidades cognitivas. Para transformar chatarra en un carrito o en una muñeca, por ejemplo, se necesita capacidad de abstracción, imaginación y mucha creatividad.

Memoria

Por medio de la percepción, nuestro cerebro organiza y procesa la información de los sentidos, integrando los estímulos y asignándoles significados.

Después de notar los estímulos, comprendiendo sus conceptos y dándoles un significado, necesitamos registrar este conocimiento, fijarlo y accederlo cuando sea necesario. Esto sucede por medio de la memoria.

¿Cómo desarrollarla?

El juego de la memoria no tiene ese nombre por nada, ¿verdad? Tanto él como otros juegos como el ajedrez, los rompecabezas, las cartas y los juegos de mesa son formas divertidas de perfeccionar habilidades como la memoria, la concentración y la atención del niño, fomentando el raciocinio y la resolución de problemas.

¿Y quién dijo que los videojuegos no pueden ser un gran aliado en esos momentos? Los juegos en línea también traen muchos beneficios. Sin embargo, esto debe hacerse de manera controlada, debido a los efectos nocivos de la exposición prolongada a las pantallas, y preferiblemente con la supervisión de un adulto.

Comprensión 

La comprensión depende de la observación del mundo y de todo lo que sucede en él, para, a partir de ahí, comprender lo percibido de forma lógica.

Esta es una de las habilidades cognitivas más básicas y fundamentales. Proporciona la base para la creación de ideas y desarrollo del raciocinio.

¿Cómo desarrollarla?

En el día a día, hazle preguntas al niño que trabajen causa y consecuencia. Por ejemplo, ¿qué pasa si dejamos el helado fuera de la heladera en un día de calor?

Este tipo de pregunta aparentemente sencilla hace que tu hijo imagine situaciones que podrían ocurrir con el helado, mientras raciocina sobre lo que puede causar el calor, fomentando la comprensión y el entendimiento.

Lenguaje

Es la expresión del pensamiento. Realizar esta tarea de manera clara, precisa y objetiva exige organización del pensamiento, que se revela en las formas como se utiliza el lenguaje. Cuando se utilizan palabras escritas y habladas, el lenguaje se llama lengua.

¿Cómo desarrollarlo?

La lectura es una de las mayores aliadas del desarrollo del lenguaje. Pero incluso antes de eso, cuando el niño es más pequeño, esta habilidad se puede desarrollar. El vocabulario puede comenzar a expandirse desde que es un bebé.

Esto se puede hacer al conversar con el niño, aunque no entienda lo que se dice, o usando canciones. Al aprender canciones infantiles, el niño aprende también nuevas palabras y agudiza su curiosidad.

Emoción

Como la mayoría de las habilidades cognitivas, está relacionada con los estímulos. En este caso, la emoción es una reacción, que puede provocar sensaciones agradables o desagradables.

Las emociones influyen en la forma como el niño piensa, siente y actúa en diversos contextos. El desarrollo de las habilidades socioemocionales es fundamental para formar la base de relaciones saludables y una buena convivencia social.

¿Cómo desarrollarla?

Para empezar, todo lo que vas a necesitar es un espejo. Eso es. Frente a él, haz muecas con el niño, practicando expresiones de alegría, tristeza, rabia y miedo. Conocer sus propias emociones hace que sea más fácil para el niño trabajar con ellas.

Los juegos antiguos, como "estatuas", desafían al niño a permanecer estático y en silencio por unos momentos. Más que un juego sencillo, esta es una excelente manera de ejercer el autocontrol y dominio de las emociones.


Planificación

La habilidad de planificación está relacionada con la capacidad de pensar en el futuro. Es decir: en lugar de probar caminos en la práctica para alcanzar un objetivo o realizar una tarea, el niño anticipa mentalmente este proceso.

Esto significa hacer hipótesis, elegir las acciones necesarias para lograr un objetivo, determinar el mejor orden para ello y establecer un plan.

¿Cómo desarrollarla?

Una vez más, es posible utilizar nuestra vida cotidiana para ejercitar esta habilidad. ¿Vas a hacer un viaje? ¿Qué tal sentarte con tu hijo y planificar los lugares que van a visitar, en qué días, y qué tipo de ropa llevar?

También puedes hacer este tipo de ejercicio a diario, ya sea con la lista de la compra para el mercado o los materiales que se deben organizar en la mochila escolar, por ejemplo.


¿Cuál es el papel de los padres en el desarrollo de las habilidades cognitivas?



Al estar más cerca de los hijos, los padres tienen un papel fundamental en la estimulación del desarrollo cognitivo. Y lo mejor es que no necesitas mucho más que un poco de tiempo y mucho cariño para hacerlo.

Mira, a continuación, algunas sugerencias:

Formentar la lectura 

Reserva un momento diario para la lectura. Los padres pueden leerle al niño, o el niño puede leer solo, si logra hacerlo. Lo más importante es crear un ambiente que valore la lectura (si tienes dificultades, mira esta publicación con consejos para desarrollar el gusto por la lectura).

Hacer deporte

También vale la pena usar los deportes para desarrollar capacidades como la atención, enfoque y planificación. Los juegos en equipo estimulan competencias como el raciocinio lógico y la confianza en uno mismo.
 
Una investigación realizada por científicos de la Nottingham Trent University, de Inglaterra, descubrió que un conjunto de habilidades mentales como la memoria, pensamiento flexible y autocontrol suele mejorar inmediatamente después de la realización de ejercicios físicos.

Salir de casa

¿Qué tal una visita a la biblioteca, o ir al teatro? Trabajar las habilidades cognitivas del niño tiene que ver con nuevas experiencias, y va mucho más allá del salón de clases.

Salir de casa abre un mundo de posibilidades. Haz paseos con el niño al aire libre, en que pueda interactuar con la naturaleza. Y ni siquiera tienes que ir muy lejos. Actividades como plantar un árbol o cuidar el jardín son opciones que están a solo unos pasos de distancia.

¿Cómo puede la escuela desarrollar las capacidades cognitivas en los niños?

El sistema nervioso tiene una capacidad llamada neuroplasticidad o plasticidad neural. Eso significa que el cerebro puede modificar su estructura, creando nuevas células y haciendo nuevas conexiones, de acuerdo con los estímulos que recibe.

Por lo tanto, la escuela tiene un papel importante. Además de impulsar el desarrollo cerebral, también puede ayudar a detectar dificultades. Al identificarlas, es posible mejorar las habilidades cognitivas con tareas que perfeccionen esas capacidades.


¿Kumon es bueno para desarrollar capacidades cognitivas en la etapa infantil?

Al estudiar en Kumon, el alumno amplía su capacidad de concentración, se vuelve más responsable de sus propias tareas, aumenta su deseo de aprender, tiene gusto de adquirir nuevos conocimientos y asume una postura autodidacta y enfocada frente a los desafíos de la vida.
 
Además, aquí en Kumon, utilizamos diversos materiales para estimular las capacidades de los niños. Los flashcards, por ejemplo, son tarjetas que muestran una imagen y la palabra que se usa para nombrarla. Eso contribuye a desarrollar el habla, el vocabulario, entrena la capacidad de memorización y el interés por aprender a leer.




Conclusión:


Al estudiar en Kumon, el alumno amplía su capacidad de concentración, se vuelve más responsable de sus propias tareas, aumenta su deseo de aprender, tiene gusto de adquirir nuevos conocimientos y asume una postura autodidacta y enfocada frente a los desafíos de la vida.

Además, aquí en Kumon, utilizamos diversos materiales para estimular las capacidades de los niños. Los flashcards, por ejemplo, son tarjetas que muestran una imagen y la palabra que se usa para nombrarla. Eso contribuye a desarrollar el habla, el vocabulario, entrena la capacidad de memorización y el interés por aprender a leer.

Tags: kumon, soft skills

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